jueves, noviembre 08, 2012

INTOLERANCIA, DESCALIFICACIONES Y APANDILLAMIENTO

INTOLERANCIA, DESCALIFICACIONES Y APANDILLAMIENTO En 1996 accede a la dirección de los destinos de nuestra patria la visión más fundamentalista de nuestros políticos. Igual que cierta secta religiosa que, se consideran los únicos salvos y escogidos por Dios, se vendieron como pulcro. Para ellos todos los demás eran corruptos. Sus voces, clasificaron la sociedad dividida entre ellos, los impolutos y, los demás. Los amarres, la forma y de la mano de quienes llegan al poder, nos muestran lo que verdaderamente escondían: superaron con crece los vicios y enfermedades de los más conservadores, e inclusive, la dictadura. Corrompieron el alma, los valores, los sistemas de creencias, educativos y organizativo nacionales. Desviaron la esperanza de este pueblo hacia otras latitudes. Las mencionadas corrientes políticas, nunca lograron permear las profundidades del pueblo dominicano, como ellos. Antes de llegar al poder, habían empezado dividir las organizaciones de masas qu teníamos. Para esto, utilizaron sus representaciones en los sindicatos. No fueron pocos las desmembraciones frutos de su actitud intolerante. Ya en el poder, sin duda, han sido más cautos. Su intolerancia se ha expresado de forma mas solapada. La fuerza corruptora del dinero y la compra de voces prostitutas, les permite pasar desapercibidas muchas bajezas. Igual que la dictadura, y un chin más allá, todo el que cuestiona lo que ellos hacen o plantean, es del partido opositor. No hay derecho al razonamiento .Mucho menos al disentimiento, si no se quiere ser descalificado. Hay que ver las caras que ponen ciertos personeros para descalificar a los que les adversan. Igual actitud adoptan los creadores de opiniones que se convirtieron en cymathoa de ellos en el poder. De la forma más burda nos estrujan, lo que pueden hace con el dinero que usufructúan. No han sido raras las compras de opositores, las imposiciones, las manipulaciones y justificaciones de políticas impopulares. Cabe destacar la corruptela implantada sobre el mecanismo democrático de los concursos. A pesar de nuestra acendrada inclinación a hacer acusaciones infundadas, son demostrables el uso de este adminículo para poner a los compañeritos en puestos claves, mientras se le pasa por encima a otros que no son de los de ellos. Presentamos una crisis en extremo abarcadora. Nos hipnotizaron diciéndonos que nuestro país crecía como ninguno en el continente. ¡Oh sorpresa! El cambio de gobierno y, porque ya no lo pudieron ocultar sacan a flote el enorme déficit fiscal que acumularon los “super administradores”. Como siempre, estos le adjudicaron la culpa al gobierno que sustituyeron hace ocho años. Olvidan los barbarazos, los derroches, las ineficiencias y los casos pendientes, como los cometidos en educación, el SEMMA, la cámara de cuentas, la oficina supervisora de obras del Estado, obras públicas, entre otras tantas otras. ¿Quién responderá por esto? ¿Acaso el culpable es el fantasma de Trujillo? ¿Por qué las voces agoreras no piden muerte para esos ladrones? ¿Cuántos casos conoce nuestra historia en que los desfalcadores, malos administradores, asesinos, ladrones, apáticos y encubridores que manejaron poder, hayan sido enjuiciados? Salvo Lilis y Trujillo, que recordemos, los demás han esquilmados los recursos, sacrificado la nación y no ha pasado nada. Sus familias, han actuado peor. Apoyadas por el control de la justicia y la supremacía sobre los cronistas e historiadores, les ha permitido burlarse de la población y agrandar las riquezas heredadas. El enorme déficit hay que buscar la forma de corregirlo. Una vez más, los menos favorecidos son los llamados a sacrificar para tal fin. ¡Al ser ellos los causantes de la situación creada, por dejarse utilizar, aceptando recibir la tarjeta solidaridad, ahora lo pagaran! Los que utilizan este instrumento como herramienta de poder, se lavan las manos. Es posible que el dinero que pagan a los francotiradores para justificar y defender sus políticas y la cantidad de individuos que tengan que matar en las calles, no sea suficiente para frenar el hambre, la pobreza y desesperación en la sociedad. Se habla de una estabilidad y una paz social que ha beneficiado a los empresarios. La misma, ha favorecido a los que administran el gobierno, inclusive, a los que recogen las migajas. ¿Se pueden contabilizar los servicios que se han trocados, la cantidad de individuos que han sido desamparados, los jóvenes muertos y la cantidad de metales sacados en connivencia de las autoridades del país? Los delincuentes se dividieron la repartición de los bienes del país. Descalifiquen. ¡Antes de eso, piensen en como se vive con un sueldo mínimo! Se plantea que, los que crearon el déficit, que lo paguen. Esta posición, desde el partido en el poder la ven como una persecución contra el saliente presidente. La actual conformación de la justicia, no está en capacidad para llamar al banquillo de los acusados al expresidente; tampoco a sus exministros. Este es el precio de la estabilidad de la cual nos hablan: no se les puede acusar e imagino, tampoco llamar ladrones, a quienes no son capaces de explicar este colosal déficit. ¡Dicen zape…. Todos los gatitos se reúnen en torno a los gatos mayores! Adoptan una línea política. . Del problema se habla en función de resolverlo, no de las causas y culpables lo provocaron. ¡Hay que desviar la atención, el pueblo esta mal comio, por tanto, no piensa! ¡Las voces disidentes, pronto se cansaran! Mientras tanto, activemos las voces pagas para desacreditar a quienes hablan de protesta. La Reforma va porque va…así lo decidieron quienes la crearon. ¡Solo nos la quita Dios…! ¡Lamentablemente, él no se mete en esos problemas!

JUSTICIA SECUESTRADA, ENSORDECIDA Y TENDENCIOSA

JUSTICIA SECUESTRADA, ENSORDECIDA Y TENDENCIOSA Muy alejadas de las intenciones de Duarte, es el uso que se le ha dado a la justicia en esta República Dominicana. El manejo que los representantes de este poder público le han dado a varios casos de su incumbencia y de toda la ciudadanía, desdice de su rol. Nos mueve a serias interrogantes, reflexiones y comparaciones. ¡Con que maestría se hacen los ciegos, sordos y mudos, aquellos que deben velar, porque, las leyes regule las relaciones de esta sociedad! Como sirven las auto-declaraciones de incompetencias, las inhibiciones y otras irresponsabilidades. ¡Cuando la asunción personal de responsabilidad se trata y los enjuiciadores tienen poder de respuestas, los jueces hablan otros idiomas! En este país, no hay ningún respeto a las normas de buenas costumbres. Frente a los intereses económicos nacionales y extranjeros, la justicia, es un instrumento avasallador y justificador por excelencia. Las normas, valores y principios que nos dieron origen, no tienen importancia. El sometimiento a intereses egoístas se justifica por estar adherido a acuerdos internacionales. ¡Buenos instrumentos para la igualación de las leyes, valores, aspiraciones y, tal vez, sometimiento, de todos los países a lo que controlan los organismos internacionales! Trujillo y quienes le acompañaron, abusaron de su poder y, pusieron a la justicia a su favor. Cualquiera que quisiera hacerle daño a un vecino, sólo tenía que utilizar la frase “fulano de tal hablo contra el jefe”. Esta fue la más temida expresión durante todo el régimen. Muchos perdieron la vida por haber sido acusado de esto. Habría que investigar la cantidad de abusos y muertos que se produjo debido a esta causa. Desaparecida la “Era trujillista”, se adopta una nueva acusación que había sido acuñada con Trujillo: “El mejor comunista es, el comunista muerto”. Los que desde la oscuridad asaltaron el poder en nuestro país, a partir de 1961, para consolidarse en el mismo y ganar el apoyo de EE.UU., aniquilaron, maltrataron, desmoralizaron, con la frase adoptada como fondo, a todo el que le adversaba. La población civil, pero, sobre todo el estudiantado, pasó a ser presa de estos abusadores. Una sociedad cuyo principal fundamento constitucional es ser civil, y, aun siendo administrada por un individuo con estas características, “el argumento de entrada para maltratar a la población en las calles, siempre fue, y sigue siendo para muchos, el golpe y cállese civil”. Vivimos momentos muy duros, de grandes ladrones, cobardes y apoyados, que aún se esconden tras “tecnicismos democráticos”. De la imposición de las mismas armas a todos los imputados, los desaparecidos y la convivencia de la justicia con esta vagabundería, la historia guarda bastantes recuerdos. Cabría destacar los cementerios de los que se enorgullecen tener muchos exjefes policiales y matones. De todo esto es momento de hablar. Quienes eran jueces, fiscales, chivatos y matones, de alguna forma, ante la historia, tienen que rendir cuenta. Ya es tiempo de que cada cual asuma la responsabilidad por lo que hizo. No son inocentes aquellos que mutilaron lo mejor de nuestra juventud para apropiarse de los recursos que dejo el sátrapa. ¡Sus hijos, los que usufructúan estas riquezas, deben saberlo! La justicia sigue siendo una marioneta en los pensamientos, intereses y prácticas, de los políticos que nos gobiernan. De igual forma, de ciertos profesionales liberales y entes aprovechados de la sociedad civil. La elaboración de ciertas leyes en otras latitudes y copiadas y defendidas aquí, son elementos más que suficientes para pensar así. Ejemplo de esto son el código del menor y la ley a favor de la mujer. Una evaluación de estas nos deja muy mal parado. Los problemas que estos han traído dejan mucho que desear. El simplismo con que se juzga a quienes ven en ellas más un problema que una solución, denota su no sostenibilidad. No extraña que una simple acusación sea suficiente para la instrumentación de una acción legal, sin que se haga una investigación. Tal vez por esto, tantas acciones suicidas. Volvemos, o nunca hemos salido, a época de control de la Santa Inquisición. Los medios mediáticos se han convertido en jueces implacables. Los verdaderos jueces no deben dejarse manipular por la prensa. Su firme convicción de que la justicia debe ser justa, debe guiar siempre sus acciones. No tiene derecho a imponer justicia aquel individuo que con su dictamen en vez de defender a la sociedad, zahiere a uno de sus miembros, se inhibe, para evitar situaciones tortuosa. A ninguna parte se avoca una nación que, la justicia es aplicada por asesinos en las calles contra jóvenes a los que no se les brinda oportunidades. Hasta que no se activen o creen mecanismo de autodefensa y limpieza, las leyes serán las herramientas idóneas para justificar abusos, irresponsabilidades y desigualdades. Estos la harán funcional. Los operativos, pasaran a ser instrumentos de excepción. Tal vez entonces, legisladores, jueces, fiscales, abogados, comentaristas, policías y entes particulares, las dejaran de narigonear a su antojo, sacándole dinero y poder. Cuando los abusos se vuelquen contra sus perpetradores, la situación del manejo de las leyes cambiará.