martes, marzo 19, 2013

REPARAR, CONSTRUIR Y SUPLIR ESCUELA EN R.D.

REPARAR, CONSTRUIR Y SUPLIR ESCUELA EN R.D. Pésima es la experiencia que se ha acumulado entre la escuela con los reparadores, constructores y suplidores privados. Los casos más connotados y, que están fresquecitos en la mente, son los escándalos por el desayuno escolar. Muchos de nuestros niños vieron sus vidas en peligro de forma repetida. La lucha por la coexistencia en la repartición del pastel que significa los recursos que se destinan al desayuno escolar, llevó a la realización y encubrimiento de barbaridades. Nunca trascendieron las causas o los culpables de que tantos hijos de la patria y de forma tan frecuente cayeran intoxicados. ¡En sus momentos, las autoridades dieron respuestas risibles! No son pocos los casos de reparaciones y servicios a escuelas que han puesto en entredicho los tratos de la escuela con empresarios. Por ahí andan muchísimos centros, sin causas aparentes, agrietados! ¡Señalan algunos, casos de capa asfáltica que, acabada de poner, filtran! ¡Después que estos pejes pasan por un lugar y recogen los instrumentos, no vuelven...! Recurrentes son los casos en que para apoyar el sector privado se dejan pasar cuestionables indelicadezas. Con estupor, en esta nueva fase que justifica mucho dinero para la construcción y reparación de escuela, hemos visto como han sido destruido baños con cerámica de primera, para ponerle otra. Igual se han destruido aceras en buenas condiciones para volverlas a hacer. ¡No hay dinero para educación pero, si para tirarlo por la cañería! ¡Qué ricos somos...! En estos momentos que educación hizo un aumento unilateral del sueldo de algunos maestros, cabe reflexionar. ¿Qué sentido tuvo el carácter de la lucha? ¿Para qué el compás de espera si a las autoridades lo único que les interesa es el diez por ciento de las compras, que seguramente tienen bien repartida, para lucrarse? Las autoridades y el sector privado decidieron que los profesores son un saco de ñame. Por eso lo tratan así. Sólo los incapaces no entienden los gastos en que incurren los abnegados trabajadores del conocimiento para llegar a sus centros de trabajo. ¡Las autoridades, ante la opinión pública, les resolvieron el problema! Es tiempo de lucha. Los intereses no deben obnubilar la razón. Entre tantas mentiras y descalificaciones, uno de los sectores debe permanecer cuerdo. Alguien debe recordar que la patria se construye desde la escuela. Esta no es simple paredes y mobiliarios. Sin el concurso de verdaderas autoridades, no comerciantes, verdaderos maestros y estudiantes -y padres que los envíen a estudiar-, no será posible la escuela. No habrá mejoría en el sistema educativo hasta que se unifique criterio y saquemos los intereses mezquinos que nos hacen estar en desbandada. Se presenta una buena oportunidad, en esta crisis, para rescatar el sistema educativo. Hace tiempo se vienen desarrollando una campaña contra el magisterio. Se dice que, éste es un abusador, no trabaja, se lo gana suave, no pone tareas, vive enamorando a las muchachitas y mil barbaridades más. Los maestros nunca han contestado. Esto les ha brindado una excelente oportunidad a arribistas y padres irresponsables para justificar sus dañinas y comerciales acciones contra la educación, el descuido, la desorientación y falta de atención a las tareas que se asignan en las escuelas. Si bien es cierto que hacen falta aulas para suplir el creciente déficit que tenemos de éstas, las necesidades nodales del rendimiento de los niños que asisten a los centros educativos radica en otra parte. ¿Saben los padres, autoridades y sociedad, en qué condiciones llegan los escolares cada mañana a las aulas, después de noches y madrugadas enteras pegados en el computador en las redes sociales? ¿ A quién se le habrá ocurrido pensar en la influencia de distractores como el celular, las disputas por las modas, las portadas de los cuadernos, la separación de los padres y otras tantas nimiedades, que sólo se conocen en el aula, de la era digital y la posmodernidad? Las acusaciones al magisterio por parte de las autoridades educativas, que nunca debieron haberse puesto tan al descubierto, denota que educación estuvo dirigida por un conjunto de come cheques. Sus deficiencias las reflejan en la sección más débil de la soga: los maestros. Como dignificar la vida de estos no les reporta beneficios, se muestran reacios. En la construcción y las grandes compras está la ganancia. Los maestros deben entender que ellos conseguirán el sueldo que se merecen solamente luchando. A las autoridades, quienes se esconden detrás de ellas y a quienes estas pagan para propagar difamaciones no les quita el sueño lo mal que ustedes comen al mediodía, lo que caminan a pies para llegar a sus centros, las dificultades que dejan en sus casas, quién atiende a sus hijos y si estos va a la escuela. ¡Al maestro sólo le queda luchar por alcanzar el cien por ciento de aumento salarial! Nunca debe pactar no utilizar la única herramienta de presión que tiene. ¡La educación debe dolernos a todos! Sacrificios al maestro debe significar sacrificios para todos. Un simple aumento salarial no puede resolver el descreimiento que se sembró en la población contra los educadores. Las autoridades tendrán que pedir disculpas o demostrar cuales son los maestros analfabetos. ¡Sería lo justo...!

HEROES Y ANTIHEROES Y SUS INFLUJOS SOBRE LA HISTORIA Y COTIDIANIDAD

HEROES Y ANTIHEROES Y SUS INFLUJOS SOBRE LA HISTORIA Y COTIDIANIDAD Al rastrear la historia reciente dominicana sorprende la gran cantidad de individuos que ofertaron sus vidas por el bienestar material y espiritual de sus conciudadanos, la real independencia nacional, el derecho y el deber de cada uno a disfrutar y proteger las riquezas de las que somos poseedores. Si bien esto da sentido de orgullo, no menos cierto son las preocupaciones que generan la orfandad creada en el pensamiento de los habitantes comunes de las hazañas de héroes dignos de imitar. El juego político y sus actores, con todos los recursos a su disposición, se encarga de minimizar o ridiculizar las acciones heroicas, sacar de la palestra a personajes y hechos, embaucar a figuras de solvencia moral y, en el menor de los casos “honrar valentía y heroicidades”, siempre, como hechos suicidas, creadores de divisiones y fuera de contextos. Físicamente han matado a la mayoría de nuestros pro-hombres. Nos hemos adaptado. Moralmente, en buena parte de los casos, por igual se han eliminado. Sus pensamientos y pautas, han sido tiradas al olvido, vilipendiados y tergiversados. Lo interesante de todo eso es que, de muchas formas hemos sido participe de estas barbaridades con felonías a los principios, miopía, en la distinción de aliados y en la omisión al no denunciar acciones que detectamos y que generan pobreza mental en la sociedad. Los malos dominicanos y los abiertos traidores, con facilidad pasmosa, entregan la soberanía, las riquezas y sus gentes a intereses extranjeros. Cualquier furtiva protesta, para ser descalificada recurren a la manida expresión de que los inconforme o patriotas están atrapados en métodos de luchas de los setenta. Esta fórmula es una muletilla entre los opinadores y políticos que están adheridos como garrapatas a los gobiernos y reciben prebendas por defender, callar o tergiversar acciones en favor de los podridos partidos o gobiernos que les paguen. Esos, son verdaderos mercenarios de la palabra. Se venden al mejor postor y se cubren tras el sagrado derecho de informar, aunque a otros, se los nieguen. El colegio de periodista y los miembros de éste, los tienen a un lado. Sus influencias con el poder es exclusividad de ellos. Para nada la utilizan para que se mejore las condiciones económica de aquellos. Mucho menos para democratizar el quehacer periodístico. La SIP y las acostumbradas posturas de esta frente a los derechos de nuestros pueblos, es su guía. El haberse adueñado de los criterios que se emiten diariamente, les hace creerse dueño de la opinión pública. En tal sentido, se nombran como tal. Las opiniones de los que sufren las maquinaciones y perversidades de los que detentan el poder político y económico, no les importa. Las voces de “notables”, casi siempre sinvergüenza, son las versiones que se estilan en medio de las crisis que se generan. Llama poderosamente la atención lo raudos y veloces que son cuando surge una situación que toda intereses de inversionistas en nuestro país. Vemos su empeño en ser los primeros que, supuestamente siendo honestos y prácticos, comienzan a sopesar la importancia del Estado de derecho y la necesidad de mandar señales de respeto a la inversión extranjera. ¡Hum, poniéndose donde el capitán los vea! Los derechos del pueblo no cuentan. Estos, incluso ante cosas como las que señalan que fueron aprobadas con mala fe y por componenda de delincuentes. Los que no hacen más que lucrarse de las crisis y los tratos de estas en los medios de comunicación, son muy dado a pedir a otros sectores sacrificios por la patria. Muchos temas, de los que no tienen ni idea de las causas que los generan, son tratados con ironía, falta de profundidad y el sello del interés de la parcela política que representa el que diserta en el momento. ¡Parecería que ideológicamente estamos fritos! ¡Nuestras esperanzas eran verdes y, los burros se la comieron! Nos han hecho creer que estamos atrapados, sin opciones, entre votar por un malo o uno menos malo. Tal vez la mayoría lo crea así. Por eso, la existencia de tantos buscavidas rápidos. No están dispuestos a dejarse morir en este ambiente individualista. ¡Se la buscan como sea...! Estos antihéroes, esclavos del dinero y amos de la manipulación de las informaciones, con su pragmatismo, sustituyen los ejemplos de entrega de aquellos que cayeron por una utopía. La ostenticidad que presentan y su nivel de gasto, los presenta como sustitutos de aquellos que perecieron masacrados por “pendejos”. Como son incapaces de mostrar que emularle hace falta mucha preparación, los que les siguen, en proporción considerable, son enemigos de la lectura. ¡Así son felices! ¡De esa forma no se sienten amenazados!

DESPOTRICACIÓN AL MAGISTERIO DOMINICANO

DESPOTRICACIÓN AL MAGISTERIO DOMINICANO Hay batalla que no conviene ganarse. Este es el caso de la lucha que encara EDUCA contra el aumento de sueldo de los profesores. Los representantes de los empresarios han hecho cocote con la totalidad del cuatro por ciento que se le asignó a educación. No están dispuestos a compartirlo con nadie. Con su dinero, maldad y focas en los medios de comunicaciones, tergiversan la situación Hacen ver a los maestros como responsables del deterioro del sistema educativo. Ellos, como seres extraterrestres, se excluyen. Culpan a la parte más débil de la soga: los profesores. A su falta de preparación y, por que no, a la culpa de estos en las deficiencias de sus alumnos. Recordemos el rol y compromiso de EDUCA en el fatal Plan Decenal. Quieren completar el deterioro causado por éste, sacándole todo el dinero dado de forma ingenua a educación. ¡Lo que pase de ahí en adelante, no importa! El gobierno está para resolverle, a través de sus organismos represivos, las dificultades que creen. ¡Qué visión! ¡Qué inteligencia! La educación para estos grupos de comerciantes, es un grupo de paredes. Los maestros deben estar dispuestos a soportar sus desaprensiones, irrespetos y maquinaciones. Olvidan que si el docente no puede satisfacer sus necesidades básicas, por más exigencias que le hagan su actitud estará en otra parte que no será el aula. A algunas ex autoridades, para evitar que los maestros consigan el aumento salarial, incurren en graves errores. Si los educadores tienen bajo nivel, los principales culpables son ellos. No se justifica haber administrado educación con pleno conocimiento de las deficiencias del sector, no hacer nada para superarlas y luego, desde otro litoral, salir criticando lo que no se fue capaz de cambiar o enfrentar. Tenemos un sistema educacional formal deficiente porque el informal hace rato que colapsó. En un país, donde lo oral se impone, la línea del ministerio de instituir fórmulas funcionales y concebidas en otras latitudes, no hacen mucho daño. Recuerden, sembradores de la maldad, venduteros de conciencias y focas del gobierno, los maestros nunca podrían elegir políticas como la que promueve a segundo de primaria sin estar alfabetizado. ¡Busquen sus genios! La estructura del ministerio, aunque prostituida por la política partidaria, se ha mantenido funcional. Las improvisaciones de la sede, que saca a los escolares de las aulas, están a la hora del día. Las fiscalizaciones y presiones a los maestros, por directores, técnicos y, últimamente coordinadores, para que reflejen con calificaciones irrealidades del alumnado, son temas que se deben abordar. Los padres y el alumnado que asiste a los centros educativos, lejos de utilizar estas instituciones para enaltecer el alma de sus vástagos, las usan para quitarse el problema que sus descendientes representan. Los pequeños, para no aburrirse en las casas o evitar hace oficios hogareños. Hay excepciones. Estas están marcadas por el rendimiento, las buenas costumbres y el respeto de esos escasos estudiantes a sus compañeros y profesores. De éstos, cabe decir, son burlados y robados con mucha regularidad, por sus compañeros. La prensa y los opinadores se creen infalibles, pulcros, inalcanzables y alejados del proceso enseñanza-aprendizaje. Olvidan que, para educar a un individuo, se necesita toda una comunidad. ¿Se han preguntado si cumplen con la parte que les toca? Cuando una parte de ésta es servil, emite juicios sin investigar, como es el caso de la mayoría de los periódicos, en torno a la lucha de aumento salarial de los maestros, se actúa con vileza, irresponsabilidad y se es dañino. ¡Las jóvenes generaciones esto lo ven…o creen que no… La educación y formación de las jóvenes generaciones es cosa seria. Un pequeño sector rapaz no puede pretender quedarse con el cuatro por ciento que se le asignó a educación. Las condiciones de trabajo del maestro se han deteriorado a tal punto que, este sector tiene almacenes de individuos explotados. Esto va generando desencanto. Muchos que no han educado ni a sus hijos no entienden la gravedad de esta campaña en contra de la credibilidad del maestro dominicano. ¡Dejémoslo ahí… Es imposible razonar con necios…esperamos el desenvolvimiento de los acontecimientos.