miércoles, febrero 06, 2013

COMPETENCIA DE GATILLOS ALEGRES ASESINOS Y MANIPULADORES DE CONCIENCIA

COMPETENCIA DE GATILLOS ALEGRES ASESINOS Y MANIPULADORES DE CONCIENCIA Soy un extraño en esta sociedad. No acepto el acorralamiento que tiene la violencia sobre nuestra nación. Diferente a la mayoría, que se ha adaptado y con sus expresiones y acciones la alimenta, busco y sugiero soluciones para incentivar la armonía en este terruño. La incompetencia de los individuos investidos de autoridad para crear normas, ejecutarlas y penalizar, torna difícil la interrelación y la convivencia. La policía, institución que debe ser el brazo ejecutor de la justicia, se impone a esta. La independencia de esta más la falta de control o sometimiento al poder del cual dependen, han impulsado en esta la política de exterminio llamada “intercambios de disparo”. La implementación de esta política es funesta: muchos exjefes policiales con cementerios en su haber; la influencia de estos desde la sombra; la compra de las voces y conciencia de opinadores públicos; la dependencia de la sociedad de relacionistas de esta institución que, la burlan de forma descarada. El monopolio de la violencia, fruto de esta ineficiencia, se ha perdido. La delincuencia común y organizada, les disputan control en los barrios, cárceles y hasta escuelas. Lejos de tender a la solución, el problema se agrava, creando híbrido con otros organismos de seguridad. Siempre con la misma manida, fácil y rentable solución de matar a jóvenes. La población no es boba. Aunque no protesta y muchas veces se une a esta vagabundería, reconoce a los sádicos cazadores asesinos. El pago, los rangos y privilegios, que, desde la policía y otros organismos se le da a periodistas, los impulsa a aplaudir y vociferar como foca de circo, cuando de forma irresponsable se elimina a nuestra juventud. Si a quienes se inviste de autoridad para mantener la ley y el orden se abrogan el derecho de matar, aquellas delincuencias incubada por las desigualdades, falta de oportunidades y los abusos, al parecer, también se sienten con derecho a matar. ¿Quién da derecho a esta maldita cacería? ¿Cuántos jóvenes más la sociedad está dispuesta a dejar que les maten? Tendremos que ser intervenidos por un tribunal internacional de derechos humanos, para frenar tantos crímenes y juzgar a los asesinos que son protegidos por la justicia y otras instancia del poder? Un Estado que haya llegado a tener que eliminar físicamente la personificación de los males que ha creado, no merece llamarse tal. ¿Qué diferencia hay entre la delincuencia que roba, mata, atraca y controla sectores y la autoridad que la acompaña, apaña, protege, encubre y comparte los recursos que la anterior esquilma a la sociedad? ¿Cómo se justifican el acceso a ciertos rangos y direcciones en las estructuras policial y militar? ¿Cómo entender los emolumentos llamados especialidades, los tratos entre subalternos y encargados departamentales, estando de por medio la manifestaciones económicas de los primeros? ¿Cómo justificar los sobrecitos de los dueños de supermercados y tiendas a los jefes policiales? Eso es delincuencia instituida. A nadie le interesa tocar esos temas. Recientemente el jefe policial fue interpelado desde el “Revolcadero Nacional de Burro”. Desde allí, varios “representantes de los suyos”, se expresaron y exigieron al interpelado como lo que son. Les pidieron darle pa’bajo a los delincuentes. Después de esto, en la uniformada, ya no se cuida la forma. Han llovido los asesinatos. Parece que asistimos a una especie de” operación limpieza” Cuenten los muertos que se les pueden asignar a cada jefe policial que hemos tenido, a los que actúan desde la sombra y a la delincuencia y, se notara la situación que vivimos. De ninguna manera esto a mermado el desarrollo delincuencial. Todo lo contrario. Mientras más jóvenes se matan entre ellos y marta la policía, más aparecen. Esto demuestra que si la idea era contener la delincuencia, se ha fallado. Agrava más la situación el que la ineficiencia de darle pa’bajo a los delincuentes, está creando una actitud de desconocimiento a la autoridad policial y de entrega a la muerte de quienes fueron empujados al sub-mundo delictivo. La idea es, no hay nada que esperar de la policía, tampoco de la delincuencia. Uno y otros se complementan. La sociedad es presa de los dos. Sus acciones se asemejan y equiparan. Se quiere vender la idea que los delincuentes son individuos lejanos a nosotros. Estos, son fruto del “realenguismo”. Los formamos con el descuido e irrespeto a la familia y a los hijos. Las expresiones de desprecios al vecino, muestra a la descendencia los rencores y cargas negativas de nuestros corazones. La respuestas de los parroquianos a las travesuras de los niños y las objeciones de padres y autoridades a que se eduque, han permitido todo esto. Debemos recobrar el país. La policía y otros cuerpos represivos, han demostrado incapacidad para frenar la onda expansiva de la delincuencia. La justicia debe empantalonarse y juzgar a todos esos asesinos que crearon la situación que tenemos. Derechos humanos debe crear una página web, donde se deje constancia visual de las vagabunderías que aquí ocurren. Integren, realmente, a la escuela, INFOTEP y las empresas, a las comunidades y sus necesidades. Penalicen a los padres, por los desmanes de sus hijos menores. Creen una nueva policía, con otros criterios. Rompan los lazos de esta con la delincuencia y denle seguimiento a esto. Creen un código penal que resuelva las necesidades de la nación, que ponga a raya a los cuerpos represivos, la delincuencia, los abogados, comentaristas y justicia. Es imperiosa la necesidad de desmantelar la policía y su estructura mafiosa y criminal. No se debe posponer más las periódicas crisis y luego olvido de ,as ofensas de esta institución contra la sociedad para la cual se debe. Hay que quitar de las manos el documento y juzgar a aquellos que han frenado la esperada reforma. Esta debe convertirse realmente en el brazo de la justicia. La justicia debe crear un organismo alterno que le permita controlar, las acciones y desmanes de esa institución. La falta de control a esta , podría acarrear, en cualquier momento, una situación compleja.

EL PRD SE AUTODESTRUYE, QUE BUENO

EL PRD SE AUTODESTRUYE, QUE BUENO Un proceso de constante deterioro se cierne sobre las instituciones dominicanas. En esta ocasión, le toca al PRD. Este partido de trascendental influencia en la vida política de nuestro país, como otros, parece que tiene su fin cercano. La delincuencia que asaltó su dirección y desvió el rol que permitió su nacimiento, se enfrenta. Lo llevan a la misma ruta que trillaron muchas organizaciones desde la década de los ochenta: su división, desaparición o invisibilidad social. Esto resultó de capital político para los partidos que manejan el escenario de la lucha por el poder. Para los grupos de control económico, el crecimiento descarado bajo la paz y condiciones que deciden. En esta ocasión, parece que se le apagó el “jacho” al PRD. Los grupos enfrentados, son irreconciliables. La propaganda de otros, que son peores que ellos, hacen su efecto. Les han hecho creer que son una confederación de ideas y personas mal tramadas que, no tienen capacidad de ponerse de acuerdo. Desde el partido de gobierno, se burlan y ríen con las muelas de atrás. Sus experiencias de manejo del descabezado partido reformista, parece darle seguridad de encausar con éxitos, todos los intereses que en el partido blanco convergen. Saben que, el resquebrajamiento de esa institución, debilitaría posiciones y obligaría a los políticos comerciantes de allí a manifestarse cuales son. “Muchos, lo ofrecerían por batatas”. ¡Qué se autodestruya el PRD! ¡La sociedad no perdería gran cosa! Salvo la tradicional afinidad romántica con esa institución que, luchó y trajo ciertas aperturas y libertades luego desvirtuadas y vendidas, no hay nada que añorar. Buen momento se ofrece para evaluar y realizar juicios políticos a sus dirigentes. Aquellos que traicionaron la confianza de la sociedad, no se les debe pasar por alto. El partido del “buey que más jala”, igual que el reformista y el PLD, no tiene nada que ofrecer a la sociedad. Excepto circo político, un grupo de aprieta botones o levanta manos y sinvergüenzas corruptos, de los cuales podemos prescindir, no hay ninguna otra oferta. “Estos fueron los que tiraron a Pedro dentro del pozo”. No hay que ir muy lejos ni pensar profundo para identificar las peores bacterias que han producido el miasma que invade y expele actualmente la sociedad dominicana. Es grato ver que, en nuestra política, ese organismo patógeno actúa por fin, contra sí mismo. Como sociedad no debemos conformarnos con la desaparición de esa estructura política. Si queremos crecer, debemos desapasionarnos y controlar los sectores y mecanismos de agitación, tergiversación y siembra de cizañas, como punto inicial. Luego, proceder a identificar los momentos, las personas y los tratos establecidos con los primeros trujillitos ladrones, desfalcadores y asesinos que, se apropiaron de las riquezas dejadas por quien fuera su amo. A todos nos interesa saber, quienes, por cobardía, vocación o intereses económicos o políticos, arrodillaron o pusieron la soberanía nacional en juego. No menos importante son, la ventilación de las zancadillas por el control de ciertas posiciones y, por qué no, las responsabilidades por la matanza de abril de 1984 y, otras muertes. De capital importancia es determinar quiénes instauraron sustituir o cerrar el paso a los puestos dirigenciales dentro del partido y aspiraciones electivas a los líderes populares por individuos que con dinero, compran su inclusión en boletas para acceder a puestos. El partido blanco era un bien del pueblo dominicano. Después, pasó a ser el principal instrumento de sostén y enriquecimiento de los más vivos de allí dentro. Las fuerzas externas que incitan y financian las contradicciones a lo interno de esta institución, no ven que activan un vendaval incontrolable. El pueblo dominicano ha sido paciente, pero, no es tonto. Seguramente encontrará el momento para cobrar esta mala fe. ¡Qué pase lo que tiene que pasar! ¡Qué se desgarren esas fieras! Si esto forma parte de la lucha de las elecciones del 2016, que nos digan, si debemos soportar tales ignominias. ¿Vale la pena seguir pagando para mantener este instrumento de envilecimiento social? Así como esos grupos echaron a un lado las aspiraciones de sus simpatizantes, ahora les toca a ellos ser marginados. ¡Qué se coman su PRD! Sin ellos, la nación no se debilitará. Todo lo contrario, podrá respirar. Su militancia, esperemos, será más exigente al acercarse a otros políticos y líderes. ¡Basta de apoyar vagabundería!

TRAIGAN TODOS LOS PROFESORES QUE QUIERAN

c No me extraña que se quiera traer profesores extranjeros. Lo que no se propone e traer políticos y otros dirigentes para cambiar a los que tenemos. El frustratorio “Plan Decenal”, y su perversa aplicación, obligó a los sectores que involucró a asumir posiciones. La combativa ADP, ya no es tal. Las corrientes políticas que allí confluyen, alternándose el control de la institución y el freno del desarrollo de ciertos procesos reivindicativos de lucha, la engullen. Varios presidentes de los maestros y, el deterioro de los derechos de estos lo confirman. A los maestros se les han vapuleado. Todo el que ha querido, ha dicho lo que le ha dado la gana en su contra. Comentaristas, periodistas, padres, directores y técnicos educativos, los han tornado como zamba. Con un estoicismo increíble, estos soportan. Las opiniones los anteriores reflejan sus fallas y responsabilidades en los educadores. Olvidan que todos somos partícipe de la educación de las jóvenes generaciones. La estrechez mental y el egoísmo, no dejan ver que el problema fundamental de la educación dominicana es de actitud. Actitudes acomodaticias, a las cuales, han sabido adaptarse los sectores que tienen intereses inmediato allí, han favorecido el deterioro y mantenimiento del desinterés por el rol de ésta. La simple inyección de recursos no variará esto. Floretean en torno a los recursos que ya se destinan a educación aquellos sectores que se cebaron con los que movió el malogrador “Plan Decenal”, y los del BID. También buscan los suyos, los que dijeron que sí, pero, frenaron la incorporación de las TICs a la escuela. La peor actitud, la asumen los padres. Son pocos los tutores que envían sus hijos a estudiar. La mayoría buscan echarle sus responsabilidades a otros, a los maestros para que se los cuiden. Los escolares comprenden esto; se burlan de padres y educadores. Tratar de enseñar a quienes no tienen actitud para el aprendizaje es casi imposible. Sobre todo, cuando salen a flote tantos distractores y padres y autoridades educativas se ponen de acuerdo para que se apruebe, aunque no se aprenda. Recuerden el caso donde un ministro fue sometido a la justicia por oponerse al fraude en unas pruebas nacionales. ¡Qué buena pela…! No son secretos las presiones de directores, coordinadores y técnicos a maestros para que reflejen irrealidades de rendimiento en escuelas. Tampoco escapan al rumor que, en muchos negocios educativos, , los directores son los que ponen las calificaciones. Las presiones en centros públicos como privados, genera contradicciones de las cuales poco se conoce. Nuestros niños son muy inteligentes. Mucho aprenden, para el berenjenal que les creamos los adultos en el sistema en que deben asir conocimientos. El desconocimiento del himno nacional, ciertas fechas, operaciones matemáticas y nombres, refleja el grado de contradicción entre los sectores involucrados en educación. Los peores y más afectados, siempre son los maestros que se interesan para que sus alumnos aprendan. Desde aquel “Plan Decenal”, el sector más afectado ha sido el magisterio. De mucha manera ha sido golpeado. Para nada ha servido la reducción de los tres meses de vacaciones. De pocos provechos han sido los cambios de terminologías y planificaciones. La conversión de los peores maestros, por razones políticas o conveniencia, en coordinadores, directores y técnicos distritales, ha empeorado el cuadro de rendimiento. Traigan todos los profesores que quieran. Para nada servirán estos, si persiste la actual estructura mafiosa y política que controla la estructura de la educación dominicana. Habría que ver cal será la nueva actitud que asumirán los sacrificados maestros cuando se les quiera, aún más, sacrificar. Sería bueno traer a los criticones a lidiar con sus hijos. ¡El gobierno debe tener mucho cuidado, ya la pava no pone donde ponía!

QUIEN DA DERECHOS A JUZGARME MAS, NO A ESCUCHARME

QUIEN DA DERECHOS A JUZGARME MAS, NO A ESCUCHARME Juzgamos, medimos y abrogamos maldad en otros, acorde con los fardos de miserias, lascivias y rencores personales que ocultamos. Aquellos que administran justicia, son auxiliares de ésta, tienen, tienen compromisos sociales o son educadores, a cada instante, enfrentan esos demonios. El número de personas sin valores aumenta de manera exponencial en relación a los que tienen. Lamentablemente, estas fieras,con sus maquinaciones y cobardías, acorralan a gente de bien. Peor aún, siendo progenitores, matan la niñez de sus vástagos, sembrando en éstos sus resentimientos. Sostienen algunos que los niños no mienten. Olvidan, que el individuo, en sus primeros años, es una esponja que absorbe lo que hay en su derredor. Lo que se cultiva a lo interno de las casas que sirven de soportes a nuestra infancia, no es bueno. Por doquier se multiplican actitudes malsanas que los menores traen de sus viviendas. Los especialistas de la conducta y el código del menor, no previeron o, de forma premeditada, convierten a las jóvenes generaciones en entes a temer. Impactante, para los que todavía tenemos corazón, son algunas de las correrías acometidas por pre-adolescentes. Muy poco se ha analizado el tipo de inter-relaciones que se establecen entre estos muchachitos. A respetar enseñan los padres. Como la mayoría de éstos desconoce el significado de vida en armonía, que la vida en pareja es más que una relación económica y que no se puede discutir y crear crisis por todo, esto siembran en sus descendencias. No se enseña derechos individuales multiplicando la irresponsabilidad, la bajeza, la cleptomanía y la chismografía. No es verdad que las jóvenes generaciones de hoy son más libres. A pesar del grupito que de forma ejemplar, se ha hecho sentir protestando contra el descarado robo el erario público, la cementera y el colosal déficit fiscal injustificado que dejaron las anteriores autoridades, el grueso de la juventud está enredado en las mezquindades que la post-modernidad y los malos dominicanos les crearon para adormecerla. Preparamos una sociedad que avizora un futuro cercano nada halagüeño. Los hombres y mujeres que ya se forman, dejan mucho que desear por sus actitudes para con la vida y sus congéneres. Si otros países han logrados permanecer como tales, rompiendo todo lazos de comprensión entre los sexos, aquí, lo dudamos. La crianza en el más cruel egoísmo individualista comienza a manifestarse. Aunque no se diga, es de seguridad nacional las consecuencias del destrozo de la unidad familiar dominicana. La mayoría de la existente es infuncional, donde cada cual está…bien gracias. El dinero que reciben muchos sinvergüenzas para desestabilizar la familia y vivir su vida con un funcionalismo que nos he extraño, pronto se revertirá. Estos elementos, igual que los políticos, no piensan no se cubren el futuro. Advertimos para ellos y nosotros, por su culpa, tristes, crueles y olvidados asilos de desvergonzados ancianos que sembraron con éxitos sus propias desventuras. Sin duda cosecharemos lo que somos incapaces de proteger. Somos una sociedad enferma. Negociantes de la política y arribistas vividores de una racionalidad que sólo ellos entienden, han pervertido todo. Con su cuento de defensa de la democracia de la cual se sirven con la cuchara ancha, nos han impuesto la dictadura de la ignorancia y la sinrazón. Para muchos es difícil entenderlo. A través del “Revolcadero de Burros Nacional”, los levantas manos y aprieta botones aprobaron un código del menor que le dio carácter legal a la relación del Estado con los menores. Con éste, se adoptó la comprensión desarrollada de los derechos de los párvulos. A pasos agigantados los padres, centros educativos y las comunidades fuerzan la adopción del estilo de educación familiar de los pequeños que hay en los Estados Unidos. ¡Tamaño error…! Las complejidades del ser humano más las características que le agrega el realenguismo empuja a las jóvenes generaciones a las fauces de la delincuencia y los malos tratos. Se mata en entre ella y es sacrificada por la policía en las calles. Los supuestos sanos o salvados, desde sus puestos de trabajos, multiplican la mentira, el engaño, y la simulación. Toda la sociedad es víctima y parece no tener mecanismo para frenar ese derrotero que beneficia a un grupito. Los medios de comunicación se han convertido en herramientas de imposición de ideas y control social. Imponen y quitan temas de la palestra. Deciden, como si fueran opinión de todos, por la suerte de un imputado. La mayoría de las veces, se imponen a las posibles opiniones, de jueces. Aquellos que no se someten a su dictado, les imponen serias presiones mediáticas. Tal vez por eso, ciertas acusaciones, son sinónimo de seguros apresamientos y no menores condenas. La mediocridad se impone. Acorrala a los individuos y los radicaliza, llevándolo a acciones extremas, quienes, de cualquier manera, no se le escuchará en los supuestos juicios. Este es el mensaje que manda el poder judicial. ¡Muchas políticas trujillitas están lejos de desaparecer!