miércoles, febrero 06, 2013

TRAIGAN TODOS LOS PROFESORES QUE QUIERAN

c No me extraña que se quiera traer profesores extranjeros. Lo que no se propone e traer políticos y otros dirigentes para cambiar a los que tenemos. El frustratorio “Plan Decenal”, y su perversa aplicación, obligó a los sectores que involucró a asumir posiciones. La combativa ADP, ya no es tal. Las corrientes políticas que allí confluyen, alternándose el control de la institución y el freno del desarrollo de ciertos procesos reivindicativos de lucha, la engullen. Varios presidentes de los maestros y, el deterioro de los derechos de estos lo confirman. A los maestros se les han vapuleado. Todo el que ha querido, ha dicho lo que le ha dado la gana en su contra. Comentaristas, periodistas, padres, directores y técnicos educativos, los han tornado como zamba. Con un estoicismo increíble, estos soportan. Las opiniones los anteriores reflejan sus fallas y responsabilidades en los educadores. Olvidan que todos somos partícipe de la educación de las jóvenes generaciones. La estrechez mental y el egoísmo, no dejan ver que el problema fundamental de la educación dominicana es de actitud. Actitudes acomodaticias, a las cuales, han sabido adaptarse los sectores que tienen intereses inmediato allí, han favorecido el deterioro y mantenimiento del desinterés por el rol de ésta. La simple inyección de recursos no variará esto. Floretean en torno a los recursos que ya se destinan a educación aquellos sectores que se cebaron con los que movió el malogrador “Plan Decenal”, y los del BID. También buscan los suyos, los que dijeron que sí, pero, frenaron la incorporación de las TICs a la escuela. La peor actitud, la asumen los padres. Son pocos los tutores que envían sus hijos a estudiar. La mayoría buscan echarle sus responsabilidades a otros, a los maestros para que se los cuiden. Los escolares comprenden esto; se burlan de padres y educadores. Tratar de enseñar a quienes no tienen actitud para el aprendizaje es casi imposible. Sobre todo, cuando salen a flote tantos distractores y padres y autoridades educativas se ponen de acuerdo para que se apruebe, aunque no se aprenda. Recuerden el caso donde un ministro fue sometido a la justicia por oponerse al fraude en unas pruebas nacionales. ¡Qué buena pela…! No son secretos las presiones de directores, coordinadores y técnicos a maestros para que reflejen irrealidades de rendimiento en escuelas. Tampoco escapan al rumor que, en muchos negocios educativos, , los directores son los que ponen las calificaciones. Las presiones en centros públicos como privados, genera contradicciones de las cuales poco se conoce. Nuestros niños son muy inteligentes. Mucho aprenden, para el berenjenal que les creamos los adultos en el sistema en que deben asir conocimientos. El desconocimiento del himno nacional, ciertas fechas, operaciones matemáticas y nombres, refleja el grado de contradicción entre los sectores involucrados en educación. Los peores y más afectados, siempre son los maestros que se interesan para que sus alumnos aprendan. Desde aquel “Plan Decenal”, el sector más afectado ha sido el magisterio. De mucha manera ha sido golpeado. Para nada ha servido la reducción de los tres meses de vacaciones. De pocos provechos han sido los cambios de terminologías y planificaciones. La conversión de los peores maestros, por razones políticas o conveniencia, en coordinadores, directores y técnicos distritales, ha empeorado el cuadro de rendimiento. Traigan todos los profesores que quieran. Para nada servirán estos, si persiste la actual estructura mafiosa y política que controla la estructura de la educación dominicana. Habría que ver cal será la nueva actitud que asumirán los sacrificados maestros cuando se les quiera, aún más, sacrificar. Sería bueno traer a los criticones a lidiar con sus hijos. ¡El gobierno debe tener mucho cuidado, ya la pava no pone donde ponía!